Atención Temprana

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Ana 26/06/2015

¿ Da resultados el metodo Fay en niños con sindrome down? ¿ Hay alguna familia que haya trabajado con este metodo y pueda dar algun testimonio ?

Responder consulta de Ana

fany 01/07/2015

Hola, nosotros hacemos el Método Filadelfia o método Doman, la versión original de este método, desde que nuestra hija tiene cuatro meses. Te dejo mi email si quieres que hablemos. fany_p@hotmail,com. Hay críticas y alabanzas,respecto a éste y otros métodos pero nosotros personalmente decidimos conocerlo, involucrarnos y a día de hoy estamos francamente muy contentos.

DOWN ESPAÑA 01/07/2015

Estimada Ana,

A la espera de la respuesta que le vaya a dar nuestro experto en Atención Temprana, lo cierto es que todas estas terapias alternativas, como el método Doman, Filadelfia o Fay, parten de supuestos más que dudosos, y se aprovechan de la necesidad de mejora que los padres requieren para prometer resultados espectaculares sin una eficacia contrastada. No existe la terapia mágica. DOWN ESPAÑA siempre ha defendido que la mejor estimulación es la que se hace habitualmente a través de la Atención Temprana, con todas las derivaciones y adaptaciones que cada niño necesite.

Respecto a los métodos alternativos, repetimos: su eficacia no está demostrada y no tienen base científica alguna.

Un cordial saludo,

fany 02/07/2015

Buenas noches, quisiera hacer un comentario, en todo momento desde el respeto y admiración que siento por la labor que se desarrolla desde Down España. Simplemente desearía puntualizar, que nosotros en ningún momento nos hemos sentido engañados por los Institutos Doman en Filadelfia,ni se nos ha ofrecido el «método», como una terapia «mágico-curativa»para nuestra hija.

El equipo está formado por profesionales serios de todos los campos de la Medicina, la Educación, psicología (por citar algunos)
, siendo además algunos de ellos padres de niños con lesiones cerebrales de todo tipo ( desde Síndrome de Down, autismo, parálisis cerebral…).. Ellos mismos reconocen en el primer día del curso que ofrecen, que un 7% de los niños con lesión cerebral grave no experimentan mejoría. No parece algo engañoso, hablamos de resultados, que es lo que al final interesa, y que muestran a lo largo de los cursos y evaluaciones. Su lema es muy simple: Tras más de 60 años, trabajando con niños con síndrome de down y sus familias, tienen muy claro que las personas con síndrome de down tienen un enorme potencial que debe trabajarse principalmente los seis primeros años de vida del niño, por algo que conocemos, la plasticidad neurológica.

Destacan el papel clave que juegan los padres en estos primeros seis años, por dos motivos simples, nadie puede querer más a un hijo que los padres, y por la cantidad de tiempo que el niño pasa con éstos.

Los padres nos esforzamos por darles autonomía a nuestros hijos, buscamos recursos, e intentamos implementar lo que consideramos pueda beneficiarlos.

Como padres, estamos abiertos a toda la información científica y contrastada que se publique. En este sentido, estaríamos interesados en poder leer las publicaciones de estudios científicos contrastados, llevados a cabo en niños con síndrome de down que han seguido los métodos convencionales de estimulación temprana. Personalmente pienso que desarrollar estudios de este tipo debe ser complejo en población pediátrica.

Gracias, un saludo

Experto en Atención temprana DOWN ESPAÑA 06/07/2015

Estimada Ana, y estimada Fany,

Puede usted imaginar que a veces no resulta fácil responder con pocas palabras a algunas consultas del foro, sobre todo si en ocasiones se exige una concreción que no siempre es posible. En el caso que nos ocupa, no existe una respuesta tajante, en sentido positivo o negativo, ya que, como usted supondrá, no existe un método perfecto, una receta mágica.

Yo no soy quién para juzgar un programa y, mucho menos, opinar sobre unos profesionales, colegas a los que se supone experiencia y formación. Mi opinión personal se basa en la experiencia de más de treinta años en atención temprana, con niños síndrome de Down y con otros problemas de desarrollo. Es evidente que los programas de atención temprana más extendidos tienen una base teórica sólida, ampliamente reconocida y suficientemente contrastada, como lo prueban numerosos trabajos de investigación, que a veces son muy críticos con los métodos y estrategias empleados. Estos programas también se fundamentan en la plasticidad cerebral, pero ésta tiene sus limitaciones, no es la panacea. De hecho, hay publicaciones en las que se habla concretamente de esta cuestión en niños con síndrome de Down.

El problema se plantea cuando en la bibliografía no se encuentran publicaciones en las que se recojan los beneficios y las debilidades de un determinado programa (Filadelfia, Fay, por ejemplo). Ya he comentado que no existe el método perfecto, y todos tienen aspectos positivos y otros no tan buenos; lo importante es que seamos capaces de hacer autocrítica, con una base empírica, y exponer esas debilidades para mejorar.

He conocido muchos casos de niños que han seguido estas terapias, y por supuesto que tienen aspectos comunes con las más extendidas; sin embargo, también contienen otros aspectos más discutibles, como la intensidad de los tratamientos (muchas horas al día), con actividades de dudosa eficacia, con una dedicación seguramente excesiva de los padres, con un carácter demasiado exclusivista (se rompe con todo lo que se estaba haciendo previamente, fuera bueno o malo)…

El inconveniente que yo veo aquí es que, primero, no hay publicaciones en las que se pongan a prueba los supuestos beneficios, que sinceramente no se aprecian; por otra parte, no se tienen en cuenta algunas dimensiones evolutivas muy importantes, como las habilidades comunicativas y sociales. Y eso no lo digo yo –pobre de mí-; hay algunas revisiones de revistas especializadas, en las que se apuntan estas cosas, y muchas otras.

Por contra, he apreciado en los padres unas expectativas irreales, atribuyendo a sus hijos unos logros un tanto curiosos, mientras que sus conductas revelaban unas carencias más que notables (un ejemplo: una madre de un niño con síndrome de Down de 2 años decía que su hijo sabía leer a esa edad, cuando, según ella, era capaz de señalar imágenes de mamíferos o planetas al pedírselo. Sin embargo, ese niño no había adquirido patrones de comunicación y sus habilidades sensomotoras eran bastante deficientes).

Fany, estoy totalmente de acuerdo con usted en lo del papel clave que juegan los padres en el desarrollo y educación de sus hijos, especialmente en los primeros años. Y cualquier programa de atención temprana que se precie debe tener muy en consideración este tema.

En cuanto a la solicitud que usted hace para conocer publicaciones, DOWN ESPAÑA le enviará a su mail un artículo resumen. Se trata de una revisión clásica en la que usted podrá ver que hay luces y sombras, y que queda mucho por saber y por hacer.

Estamos a su disposición para cualquier duda, comentario, diálogo… Lo único que nos importa a todos es ayudar a los niños y a sus familias, ya desde el principio.

Un abrazo. Isidoro Candel

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