Estimada Mónica: ante todo tengo que reconocerle que no tengo mucha experiencia en jóvenes y adultos con síndrome de Down. Trataré de orientarle, no obstante, con el ruego de que consulte a otros especialistas de su zona.

En primer lugar, sería bueno saber si Carlos asiste a algún centro, si recibe algunos tratamientos socio-educativos. Si no es así, le aconsejo que lo lleven a algún centro de día donde sea atendido adecuadamente.

Respecto a lo del control de esfínteres, como ocurre con otras cosas, hay que intentar iniciar un proceso de educación y de entrenamiento partiendo de muy abajo, habida cuenta de sus limitaciones. Para controlar esfínteres, lo primero es que Carlos sea capaz de retener la micción durante un tiempo (una hora y media o dos horas). Si él no va espontáneamente al baño a hacer pipí, tendrán ustedes que ir recordándole cada hora, más o menos, que vaya, o acompañarlo. Se trata de ir creando rutinas y que él las vaya asumiendo a base de repeticiones, que luego recibirán su premio.

De todas, yo creo que hay hacer con Carlos un tratamiento completo que abarque todos los aspectos del desarrollo y que mejoren sus habilidades de autonomía personal y su competencia para las actividades de la vida diaria. Traten de marcar pequeños objetivos en tareas rutinarias que sean significativas para él, y ayúdenle al principio a que vaya haciéndolas. Recuérdenle que vaya al baño; él no tiene la iniciativa pero puede adquirir esa rutina, y otras, con un entrenamiento apropiado.

Le sugieron que sigan las orientaciones de profesionales, que les vayan indicando los objetivos y actividades a hacer con Carlos. Seguimos en contacto para lo que necesiten.

Un abrazo. Isidoro Candel

Mónica, veo que hubo mucho retraso en la adquisición de funciones básicas, pero el problema ahora lo tenemos en la regresión experimentada. A mí me llama la atención que controle bien la función de orinar y sin embargo la defecación no, lo que hace que desde el punto de vista médico debamos pensar de entrada en que persiste un problema en colon (intestino) o en el recto.

No hay que descartar que todo corresponda a una regresión en el plano mental, pero yo antes que nada me centraría en una exploración digestiva a fondo.

Un saludo.
José María Borrel.