Es complicado lo que usted plantea, por otro lado es lo que todo padre desea, tener un hijo sano y poder ser feliz. Lo segundo es más fácil, está en su mente, lo primero nadie se lo puede asegurar.

Yo después de haber tenido a mi hija con síndrome de Down, creo que lo que deseraría si tuviera otro bebé, sería simplemente eso, desear traer otro bebé al mundo. Aunque parezca mentira, sólo eso, tener la suerte de poder estar embarazada otra vez y traer un bebé, con los miedos y los riesgos que todo ello conlleva. Es un debate muy complejo, creo que lo importante es que usted se sienta bien informada en las diversas etapas de su embarazo, y que conozca todos los detalles, tomando la decisión que considere oportuna. Con todo ello sigo pensando, que traer hijos al mundo es así, una aventura bastante emocionante y llena de sorpresas, en la que ni siquiera nosotros mismos aparentemente sanos sabremos qué será de nosotros … en los próximos segundos.

Actualmente con los recientes tests en sangre podemos saber con bastante fiabilidad sin pruebas invasivas si nuestro bebé vendrá con síndrome de Down ( quizás eso sí lo debe saber, que hay pruebas disponibles, unas no invasivas, otras claramente invasivas, que implican poder tomar una decisión, que de alguna manera u otra llevará su vida en alguna y otra dirección), como en todas las pruebas hay un porcentaje de error, pero la ciencia no es exacta. Veo primordial que la mujer embarazada pueda informarse adecuadamente, tenga la oportunidad de expresar sus dudas, sus miedos, ser asesorada por un equipo documentado, y con todo ello pueda valorar. En nuestro caso, nuestra hija, con nuestros miedos iniciales, incertidumbre, ansiedad al diagnóstico… ha ido cumpliendo meses, y con ella nosotros hemos ganado muchas cosas, entre ellas mucho amor. La sociedad los conoce muy poco, con unas etiquetas muy equivocadas y muchas cosas más que usted ya sabe.

Sea como sea, disfrute de cada momento que tenga.