Atención Temprana

Consulta a nuestros expertos tus dudas o inquietudes y comparte con otras familias tus experiencias. Consulta los temas ya existentes antes de crear uno nuevo, es probable que alguien haya tenido antes la misma duda.
Beatriz 10/02/2015

Hola, mi hija tiene 2 años y 10 meses y todavía no camina. Gatea perfectamente y con el andador de apoyo trasero que le pone su fisio le encanta recorrer los pasillos hasta corriendo. Camina dando pasos laterales apoyada en el sillón la mesita o lo que encuentre pero si le das la mano se tira al suelo. Agarrándola con las dos manitas camina un poco más pero no le gusta y lo hace con mucha inseguridad. Lo que me preocupa es que lleva así mucho tiempo. Unos ocho meses y aunque va cogiendo autonomía perfeccionando el gateo y apoyándose parece que no avanza en querer andar ni de las manitas. Es esto normal? Aunque supongo que hay casos para todo cual es la edad más habitual de empezar a caminar solos en el S. D.?Muchas gracias.

Responder consulta de Beatriz

Experto en Atención Temprana de DOWN ESPAÑA 10/02/2015

Estimada Beatriz: por lo que usted nos cuenta, da la sensación de que su hija tiene inseguridad y miedo a caminar sola o con poca ayuda. Esto es algo bastante frecuente en los niños con y sin síndrome de Down. Como gatea bien y puede desplazarse con facilidad a cualquier sitio, tal vez prefiera hacerlo de forma segura. Además, parece que se ha acostumbrado a andar siempre con un soporte seguro y estable.

A mi juicio, habría que animarla a que se mantuviera de pie sin apoyo, en situaciones lúdicas y agaradables para ella, durante unos segundos -cada vez más-: jugando, bailando, haciendo lo que le guste. También le propongo que la animen a desplazarse teniendo soportes menos seguros: apoyada en la pared, empñujando una puerta (adelante y atrás), apoyada en un palo, pelota o juguete sujeto por el adulto.

Es importante que cuando esté de pie sin apoyos unos segundos, cogiéndola de la ropa o de un dedo, la animéis a dar un pasito (solo uno) y que se vuelva a parar. Conviene no forzarla ni atosigarla para que no se siente enseguida y rechace estar de pie.

Creo que deben ustedes ir disminuyendo progresivamente los apoyos y hacerlos cada vez más insignificantes, para que ella vaya tomando más confianza y seguridad en sí misma.

Imagino que todo esto ya lo están haciendo, pero en estos casos no hay que forzar la máquina. Sí hay que insistir un poquito, animando a la niña a que vaya aceptando poco a poco las alternativas que le proponemos.

Seguimos en contacto para lo que necesite y saber cómo evoluciona la niña.

Suerte y un abrazo.
Isidoro Candel

1 respuestas en total